viernes, 25 de agosto de 2017
lunes, 7 de agosto de 2017
¿LA DIETA QUE HACE JULANITA O PEPITO FUNCIONA PARA MI?
Frecuentemente me preguntan si un
mismo plan de alimentación sirve para otro miembro de la familia o si le servirá
a un conocido suyo que necesita bajar de peso o presenta la misma condición de salud/enfermedad.
Bueno pues le digo que aunque les parezca lo más de simple, la alimentación y nutrición es
un proceso complejo.
¿Por qué?
Porque existen unas leyes de
alimentación saludable y unas recomendaciones para
cada ciclo biológico, es decir hay necesidades específicas y diferenciales entre cada grupo (lactante, infante,
adolescente, adulto, embarazo, lactancia, ancianidad), pero además se deben considerar otros aspectos como el estado nutricional, hábitos, gustos,
capacidad económica, disponibilidad de alimentos, la relación con el alimento entre otros aspectos. Y cuando hablamos
de tratamiento nutricional la situación
se torna más compleja, ya que es necesario integrar aspectos propios de la enfermedad y del individuo.
Escucho a muchas personas decir que ya no van al médico porque ya saben
que pastilla les va a recetar y están cansados de lo mismo. Bueno pues hacer la “dieta” que hace Pepito o Julanita equivale a “más de lo mismo”; esto seguramente no le funcionará a usted a largo plazo.
Y es que aplicar tratamientos generalizados para abordar una
condición de salud, es limitarse a una perspectiva dual: a la de las características intrínsecas
de la enfermedad y a las del fármaco o
alimentos en el caso del tratamiento nutricional, olvidándose del individuo.
Este enfoque simplista es frecuentemente
paliativo, de bajo seguimiento o cumplimiento,
porque no se dirige a la causa, sino al síntoma. La causa de una
enfermedad es multifactorial: en ella
intervienen factores orgánicos, psicológicos, sociales y algo más.
La enfermedad afecta a las
personas de diferente manera: nuestros
genes y medio ambiente (incluye alimentos) interactúan en doble vía en
forma única.
Nuestro imprinter metabólico es
diferente al de pepito y al de julanita.
En los tratamientos
individualizados incluso se debe
considerar si el individuo está preparado
para hacer los cambios de inmediato o
necesita apoyo para hacer cambios graduales.
Dicho esto, respondo al
interrogante inicialmente planteado:
“Los planes de alimentación para personas saludables y personas con
condiciones de salud alteradas deben ser individualizados e integrales, específicos
para usted, porque usted es un ser único, usted no es pepito ni julanita”
Suscribirse a:
Entradas (Atom)